Comentario
MIENTRAS ESTÉS CONMIGO (I STILL BELIEVE)
Os traigo una película de esas que hay que ver SÍ O SÍ. Posiblemente el título os diga poco y seguramente ni os suene. No os preocupéis, yo tampoco sabía de su existencia. Una vez más me dejé aconsejar de una buena amiga con buen criterio.
Basada en la historia real de Jeremy Camp, cantante y compositor estadounidense de música cristiana y su primera esposa, Melissa, a quien le diagnosticaron un cáncer antes de casarse. Aunque en España Jeremy no es muy conocido en nuestros círculos católicos, en Estados Unidos ha vendido más de 5 millones de discos.
Es una historia de fe, esperanza y caridad.
De FE, porque toda la vida de Jeremy y Melissa gira en torno a Dios. Una fe que no solo no se hunde en las dificultades, sino que, en medio de éstas crece y se fortalece. No creemos en Dios “a pesar de” los contratiempos, sino “gracias a” ellos. “I STILL BELIEVE” (TODAVÍA CREO) es el título de la canción que da título a la película en versión original. ¿Cómo puede seguir teniendo fe después de lo que le “hizo” Dios?
De ESPERANZA. Esperanza en la Vida eterna que es nuestra meta, nuestra casa. Esperanza en el amor de Dios que no defrauda, aunque muchas veces sus planes no sean los nuestros. Según vas viendo la película piensas: “yo hubiera escrito esta historia de otra manera”. Solo al final entiendes que Dios no se equivoca, que todo lo hace bien, y que sus caminos SIEMPRE son mejores que los nuestros.
De CARIDAD. Sí, es una película de amor, de AMOR VERDADERO. Es un drama romántico que no tiene nada que ver con aquello a lo que nos tiene acostumbrado el cine actual. Hay que dar gracias a nuestros hermanos evangélicos que nos regalan estas historias tan bellas y tan bien contadas.
La película podría verse a la luz del himno de San Pablo a los Corintios: El amor es paciente, afable, no egoísta…todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta… ¿Es posible HOY un amor así?
Un amor puro, que sabe esperar. La película no tiene miedo en mostrar las FASES DEL AMOR: conocerse, enamorarse, primeras muestras de ese amor… Hoy en día todo está del revés: se conocen, se acuestan y luego ven si quieren seguir o no. ¡Qué desastre! ¡Qué sucio es el amor que el mundo propone a nuestros jóvenes en la música y en las películas! No me extraña que nuestros jóvenes no sepan amar…. Les han ensuciado la mirada y el corazón.
Un amor que DA LA VIDA y que entiende que la muerte no es el final de nada, al contrario, como decía Santa Teresita: “no muero, entro en la VIDA”. Por eso los santos en el Cielo brillan mucho más que cuando vivieron. Merece la pena entregar la vida por Cristo. La vida que se entrega ENGENDRA vida. ¿Dónde entrego mi vida? ¿Apuesto por el amor? ¿Aún en la dificultad?
Un amor que da sentido y valor al SUFRIMIENTO. ¡Qué distinto es ver las cosas con fe o sin ella! Esta historia no te deja triste, con mal sabor de boca, ¡al contrario! Te enseña que el amor verdadero se forja en la Cruz, y es en la Cruz donde encuentra la fortaleza para seguir adelante.
No hemos preparado a las generaciones más jóvenes a sufrir, al fracaso, a que las cosas no siempre son como tú quieres… Todo eso forma parte de la vida, del plan de Dios. No son un castigo, una frustración. “Ama hasta que te duela, si te duele es buena señal”, decía Madre Teresa.
Hay que ver esta película con adolescentes y jóvenes, y enseñarles que un amor así SÍ es posible. Todas las chicas sueñan con un “Jeremy” que las respete y las trate como una princesa. Un “Jeremy” que las ame como Cristo ama a su Iglesia, a pesar de sus heridas, gracias a sus heridas. Enseñar a nuestros chicos cómo hay que tratar a las chicas, cómo ser un caballero…
Parece que son cosas de hace mil siglos, pero estoy convencido que todavía HOY ES POSIBLE AMAR ASÍ.
Por todo esto, NO DEJÉIS DE VERLA especialmente si tenéis adolescentes en casa. (La podéis ver en Amazon Prime). Seguro que al terminar de verla surgen muchas dudas y cuestiones en su corazón. Deja huella en el corazón.
CINE EN FAMILIA.
Joaquín Garrigós
