Comentario
Después de todo el verano sin escribir ninguna crítica, no por falta de ganas sino por falta de tiempo para ir al cine y de buenas películas, por fin me he animado a retomar esta tarea que tanto me gusta y tanto bien hace.
Me ha llamado mucho la atención ver en la cartelera una película llamada “Padre no hay más que uno”. Una película española y de temática familiar y que las críticas dicen que está muy bien… tenía que verla.
Aunque la película se ha estrenado en agosto todavía está en cartelera y yo os animo muchísimo a que la vayáis a ver en familia porque además de ser tremendamente divertida, enseña muchas cosas sobre el sentido de la verdadera familia (parece mentira, pero es cierto). Y es casi un milagro que en el cine español aparezca una familia normal, con un padre y una madre, ¡y además son familia numerosa!
La película es para morirse de la risa. Yo hacía mucho tiempo que no lloraba de la risa viendo una película en el cine. Pero es que además es muy sana. Sales del cine muy contento. Ideal para no pensar mucho y pasar un buen rato.
Sobran un par de diálogos, sobre todo si vas al cine con niños. Es cierto que reflejan una triste realidad que se da en nuestras familias: nuestros niños ven y oyen de todo en el colegio, en la televisión, en la música… y luego nos preguntan de todo, porque no entienden. Quizás deberíamos estar más pendientes de lo que ven y de lo que oyen y con quien se juntan…
Por lo demás aunque no pretende ser una película profunda, sí da para hablar, porque creo que refleja la situación de muchas familias: madres que trabajan fuera de casa y luego tienen que ocuparse de todo en el hogar frente a unos padres que están tan centrados en su trabajo que se olvidan de que tienen casa, hijos… Se podría hablar también del desgaste que supone para las mujeres esta situación o de lo que supone en la educación de los niños la ausencia de la figura paterna.
Otros temas para hablar después de ver la película: la educación de los hijos es cosa de los dos, o ¿qué hacen nuestros adolescentes cuando se encierran en su habitación?, o ¿realmente nuestros niños necesitan un psicólogo? ¿no necesitan mas bien unos padres que les escuchen y les hagan un poco de caso?
Qué importante es recuperar la figura del padre y su lugar en la familia. El padre no es solo el que ayuda a la madre en las tareas de la casa, tiene su propio lugar, su propia misión, y si no lo ocupa, falta algo…falta mucho. Damos gracias a Dios por nuestro “Proyecto San José” que viene a ayudar a los padres a redescubrir su preciosa vocación en sus hogares.
Por todo esto, hechas las advertencias de ese par de diálogos inapropiados para niños, recomiendo ir al cine a ver esta peli para pasar un buen rato y dar gracias a Dios por el don precioso de nuestra familia.
